Inauguración de la exposición “La Cronometradora”, de Stella Rahola Matutes

  • “La Cronometradora” es una instalación artística que responde a una necesidad real: la escasez del agua como recurso natural. El proyecto ganó la primera edición de la Bienal de Artes Visuales Ricard Camí en 2022
  • La inauguración de la exposición será el jueves 14 de marzo a las 19h en Espai Isern Dalmau de Barcelona y se podrá visitar hasta el 25 de mayo.
  • La Bienal de Artes Visuales Ricard Camí está coorganizada por la Fundació Antigues Caixes Catalanes, la Fundació Lluís Coromina y bonart cultural.

 

El proyecto Ufana (II) de Stella Rahola Matutes, convertido ahora en “La Cronometradora” ganó la primera edición de la Bienal de Artes Visuales Ricard Camí en 2022, por tener una mirada avanzada y comprometida con las problemáticas medioambientales, haciendo uso de la capacidad transformadora del arte.

 

La Cronometradora” es una instalación artística que responde a una necesidad real: la escasez del agua como recurso natural. La exposición presenta las obras de Stella Rahola Matutes que exploran la interrelación de los humanos con el agua, una relación que se puede analizar tanto desde la dependencia que tenemos como desde los efectos irreversibles que las acciones humanas han ocasionado.

 

El jueves 14 de marzo a las 19h en la sala Espai Isern Dalmau de Barcelona, Stella Rahola Matutes presentará su obra, que se podrá visitar hasta el 25 de mayo.

 

“La Cronometradora”

 

La Cronometradora” despliega imaginarios en torno al agua a partir de una propuesta atravesada por la ecoficción y la versatilidad de un recurso esencial cada vez más escaso en el planeta. La exposición presenta las obras de Stella Rahola Matutes que exploran la interrelación de los humanos con el agua, una relación que se puede analizar tanto desde la dependencia que tenemos, pero también desde los efectos irreversibles que las acciones humanas han ocasionado.

 

Se trata de un territorio tan real como de ficción, en el que las obras apuntan a un diálogo, pero también a una tensión entre el conocimiento científico y los demás saberes.

 

¿Qué podemos aprender con la observación de ciertos comportamientos de interrelación con los materiales? ¿Cuáles son aquellos que pueden incidir en nuestras conductas diarias para mejorar nuestro medio? Éstas son cuestiones que la exposición plantea, a partir de la comprensión de los límites de los recursos para promover otros modos de vida.

 

El artefacto toma como punto de partida la observación de opciones útiles en situaciones de emergencia en las que se sufre indisponibilidad de agua bebible durante un tiempo prolongado, preguntándose su pertenencia dentro de nuestra cotidianidad.

 

La obra se presenta en el suelo con un recipiente de agua que ha salido del grifo y pasa por una sucesión de filtros y tratamientos hasta convertirla en potable. Ofrenda y tótem, es un artefacto conectado a la estructura ya los flujos del edificio. A partir de un eje metálico vertical se despliega una secuencia de piezas de vidrio descartadas de talleres de artesanos. Se trata de los fragmentos finales de producción de vidrio borosilicato que por su tipología y composición no tienen posibilidad de reciclaje en nuestro país.

 

Dispuestas en orden de mayor a menor volumen y por granolumetría, contienen carbón y piedras, gravas, arenas de sitios familiares, que conectan con la memoria. Es un viaje material y simbólico del agua desde la observación de la acción física y la reacción química.

 

La propuesta genera un proceso lento que mide una temporalidad inventada: qué tarda en filtrarse el agua dentro de este mecanismo o cuánto tiempo pasará hasta que los recursos hayan desaparecido? La materialidad del vidrio y su transparencia deja entrever el agua, pero también añade sonoridad y ritmo a la pieza, convirtiéndose en un agente vivo dentro de la sala.

 

Fotografia d’Aleix Plademunt

 

El agua filtrada se derrama en un vaso, del mismo tipo de vidrio descartado. Se invita a beber, hidratándose y formar parte intrínseco del sistema. El Registro de la experiencia de los usuarios, es un formulario abierto a las visitantes, que después de haber probado el agua de forma libre, pueden rellenar.

 

Mientras, el Registro de control de calidad del agua es un análisis que se realiza periódicamente en un laboratorio especializado para examinar las muestras de agua facilitadas. De este modo, se puede explorar la evolución, valorando los logros y fracasos de este tipo de procedimientos para la potabilización del agua. Ambas documentaciones, la experiencial y la científica quedan al alcance de consulta.

 

Stella Rahola Matutes, larga trayectoria artística

Stella Rahola Matutes (Barcelona, ​​1980) es licenciada y máster en arquitectura por la ETSAB (UPC) Barcelona y MFA por la Goldsmiths University of London (2019).

 

Entre las exposiciones recientes aparecen:

 

“La Biblioteca”, Dilalica, Barcelona Gallery Weekend. La Habitación de las Desatendidas, Museo de Can Framis, Fundación VilaCasas, Barcelona 2021, Apuntes por un incendio de los ojos, MACBA (Barcelona 2021), Beautiful Failures en el Pabellón Mies van der Rohe (Barcelona, ​​2021), Teoría de la Alegría en el MACE (Ibiza, 2020), LA Contemporary Art Fair con Union Pacific (Los Angeles, 2019), Politics of Translation en The Stone Gallery (Londres 2019), Deptford X Festival (Londres, 2018), Tulca Festival of Visual Arts (Galway, 2018).

 

Recientemente ha recibido el premio A-FAD en reconocimiento a su trayectoria (2021) y el Premio de Escultura Fundació Vila Casas (2021).

 

Stella también imparte clases en el MEATS (Master in Ephemeral and Temporary Spaces), en Elisava, Escuela Superior de Diseño e Ingeniería de Barcelona.

 

Como artista ha residido en China, Japón, Países Bajos, Suiza, Londres y Barcelona. Actualmente artista residente en Hangar.

 

Sobre la Biennal d’Arts Visuals Ricard Camí

La Bienal de Artes Visuales Ricard Camí, convocada y coorganizada por la Fundació Antigues Caixes Catalanes (FACC), la Fundació Lluís Coromina y BonArt Cultural tiene por objetivo estimular la creación artística, sea cual sea la técnica utilizada (pintura, escultura, fotografía, vídeoarte, dibujo/grabado, instalación y sonido, o combinación de todas ellas) hacia proyectos con valores sociales, a la vez contribuir a la promoción y proyección de los artistas visuales.

 

Es convoca cada 2 años y se pueden presentar proyectos que tengan como temática alguno de los ODS que marca la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible. En la primera edición, los proyectos se centraron en el cambio climático y todos sus derivados (ODS 7, 12 y 13).

 

En la primera edición de la bienal también se reconocieron a 3 finalistas, Núria Benet, por su proyecto Delirium Garden;  Adrià Gamero, por su proyecto  Quanta terra necessita una persona; y Glòria Giménez Carrillo, por su proyecto  La butaca que tenia forma de muntanya.

 

La Bienal de Artes Visuals Ricard Camí nació como continuación del Premio de Pintura Ricard Camí, que en 2019 celebró su 16ª edición.

 

Sobre la Fundació Antigues Caixes Catalanes

La Fundació Antigues Caixes Catalanes (FACC) es la continuadora de las obras sociales de las antiguas Cajas de Manlleu, Sabadell y Terrassa en Cataluña.

 

Actualmente difunde la cultura en todo el territorio y ayuda, a través de premios, a la difusión de los profesionales que trabajan en ámbitos tan diversos como la literatura, la música, las artes visuales, el dibujo, escolar, el teatro, el cine de montaña y el asociacionismo cultural.

 

Sobre la Fundació Lluís Coromina

La Fundación LLuís Coromina, constituida por el empresario Lluís Coromina Isern en 2007, desarrolla actividades en el ámbito de las artes, de la atención a las personas, de la preservación de la naturaleza y los animales y del entorno paisajístico. La Fundación tiene cinco sedes: el Espai Eat Art, El Puntal – laboratorio de las artes y Garage en Banyoles; el Espai La Perpinyana en Porqueres y el Espai Isern Dalmau, en Barcelona.

 

Más información a:

 

www.fcaixescatalanes.cat

www.fundaciolluiscoromina.cat

 

Coorganizadores: